El Palácio do Manteigueiro está situado en la esquina de la Rua da Horta Seca y la Rua da Emenda (antigua Travessa do Mel), en la Baixa Pombalina de Lisboa. Tiene una puerta que comunica con la Rua das Chagas, por la que en el passado entraban los criados y los carruajes.
Este immueble, también conocido como Palácio dos Viscondes de Condeixa, o Palácio de Condeixa, fue construido a finales del siglo XVIII según un diseño del arquitecto real Manuel Caetano de Sousa, que también diseñó la Biblioteca del Convento de Mafra y la Igreja da Encarnação de Lisboa, entre otras obras.
Su primer proprietário fue un adinerado hombre de negocios de la burguesía comercial pombalina, Domingos Mendes Dias, natural de Trás-os-Montes, que llegó muy joven a Lisboa, donde comenzó su vida como aguador, luego trabajó en una tienda de comestibles y que, tras el terramoto, hizo fortuna en el comercio de mantequilla, de ahí el apodo de «Manteigueiro», también transmitido al edificio.
El Palácio do Manteigueiro sirvió durante muchos años de vivienda a diferentes residentes, fue también sede de empresas y finalmente em Estado lo adquirió y fue sede de varios ministerios. Actualmente está desocupado.